Los expertos detectaron en torno a la fachada
superior del Templo Mayor del sitio, área donde residió la elite, un sepulcro
hecho con bloques de piedra de mampostería, de 1,8 metros de altura y 1 de
ancho, con la osamenta de un individuo, posiblemente de sexo masculino, que al
morir tenía entre 20 y 23 años de edad.
Arqueólogos mexicanos descubrieron el sepulcro
de un personaje que posiblemente dirigió hace 1.300 años el lugar hoy conocido
como Bocana del Río Copalita, sureño estado de Oaxaca, informó hoy el Instituto
Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Los expertos detectaron en torno a la fachada superior del Templo Mayor del sitio, área donde residió la elite, un sepulcro hecho con bloques de piedra de mampostería, de 1,8 metros de altura y 1 de ancho, con la osamenta de un individuo, posiblemente de sexo masculino, que al morir tenía entre 20 y 23 años de edad.
El líder del proyecto de investigación en Copalita, Raúl Matadamas, dijo que se estima que el sepulcro, el primero descubierto en el sitio, data del año 700 d.C., y aunque no se ha determinado su filiación cultural podría estar asociado a grupos que tuvieron contacto con zapotecas de los Valles Centrales de Oaxaca.
El investigador indicó que el esqueleto estaba acompañado por una ofrenda, de la cual destaca un fémur cortado que quizá servía como bastón de mando.
"Este hallazgo ayudará a entender las prácticas funerarias de las civilizaciones que ocuparon Copalita, principalmente del grupo gobernante, del cual hasta ahora no teníamos información", destacó.
El personaje, dijo, portaba un collar de cinco cuentas de jade, y sobre la caja torácica había restos de tres bolsitas, que en el momento de ponerlas sobre su pecho debieron contener pintura roja, pues algunas de sus costillas están manchadas con ese pigmento.
"Alrededor de la sepultura también descubrimos los entierros de 22 individuos más, de los cuales sobresalía el de un personaje femenino que estaba boca abajo, posición que por primera vez se encuentra en el sitio prehispánico, lo cual quizá indique un acto de sumisión hacia el personaje contenido en la tumba", mencionó Matadamas.
Comentó que sobre el esqueleto femenino había cuatro vasijas, de las que sobresale una cazuela decorada con un glifo en relieve con la representación de un búho en medio de dos serpientes, imagen que se repite en todo el contorno de la pieza y que está asociada a los antiguos zapotecos de los Valles Centrales de Oaxaca.
El especialista agregó que en la base de la misma pieza se observan también las figuras simétricas de un lagarto abriendo sus fauces, de donde se asoma el rostro de un hombre que tiene frente a él la voluta de la palabra, que tal vez se relacione con las culturas de la costa de Huatulco.
"Dichos símbolos serán estudiados a detalle para ver si es posible dilucidar, a través de ellos, la cosmovisión desarrollada durante el periodo comprendido entre 700 y 800 después de Cristo por los grupos que se asentaron en la urbe de Copalita, e identificar al personaje en la tumba", indicó el arqueólogo.
Al ampliar el área de exploración en torno al Templo Mayor se hallaron además otros 16 restos óseos. "Corresponden a una temporalidad anterior, pues de acuerdo con los materiales de cerámica que los acompañaban se trata de individuos que fueron colocados entre 300 y 700 después de Cristo", abundó.
Copalita fue ocupada por diversos grupos culturales entre 600 a.C. y 1519 d.C., entre ellos los mixe-zoques, los pobladores más antiguos del sitio, así como chontales y mixtecos, hasta la llegada de los españoles a principios del siglo XVI, cuando se dio el abandono del lugar debido a una epidemia, según registros de cronistas españoles.
Extraído de Terra
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