El investigador Svante Pääbo ha logrado secuenciar el genoma del homínido de Denisova, la misteriosa especie encontrada en 2010 en Siberia y de la que sólo nos ha llegado el fragmento de un dedo infantil y dos piezas dentales.
Dos perspectivas de un molar del humano de Denisova. |
En marzo de 2010, un extraño fósil salió por primera vez a la luz pública. Encontrado dos años antes en la remota cueva siberiana de Denisova, en los montes Altai, se trataba de un fragmento del dedo meñique de una niña (o de un niño) de unos siete años de edad que habitó en esa región hace más de 50.000 años. En el mismo lugar se encontraron también varios artefactos y herramientas y, algo más tarde, dos piezas dentales.