A partir del descubrimiento de un
nuevo cuadro atribuido al gran maestro
italiano analizamos la técnica de este pintor que supuso la ruptura con el
manierismo renacentista y el inicio del barroco
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| Imagen de la ‘Medusa’ de Caravaggio |
Pese a
lo que pueda parecer la historia del arte tiene muchos momentos apasionantes,
entre otros los nuevos descubrimientos
de obras, algunas perdidas y otras de las que ni siquiera se tenía
conocimiento, atribuibles a los grandes maestros. Es el caso de la noticia de
la que seguramente muchos de vosotros os habréis hecho eco estas semanas, pues
ha aparecido en toda la prensa mundial.
La aparición de un supuesto Caravaggio en un trastero de la ciudad francesa de
Toulousse, gracias a la búsqueda del origen de unas goteras.
Se
trata de un óleo sobre lienzo de 144 x
173,5 cm. que representa a “Judith decapitando a Holofermes”, los peritajes
apuntan a que se trata de un verdadero Caravaggio original, a pesar de que como todas las obras del autor, salvo “La
Degollación de San Juan Bautista” del Oratorio de la Catedral de la Valetta, no
está firmada.
La
valoración de la obra por parte de los expertos del Museo del Louvre aún no se
ha hecho pública y parece que no ha sido concluyente, sin embargo ha servido
para que el Ministerio francés de
Asuntos exteriores emitiera un decreto por el que el cuadro no puede salir de
territorio francés en al menos 30 meses, no es de extrañar si nos atenemos
a que el cuadro está valorado en unos 120 millones de euros de conformarse definitivamente
su autenticidad.
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Nuevo Caravaggio en el que se representa a “Judith decapitando a Holofermes”
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Nicola Spinoza, es el exdirector del Museo de
Nápoles y está considerado como uno de los mayores expertos mundiales en
Caravaggio, él da la atribución al cuadro del italiano por cierta: “La
iluminación particular, la energía típica de Caravaggio, sin correcciones, con
pulso firme y los materiales pictóricos hacen pensar que es auténtico”
dice, pero matizando “sobre Caravaggio siempre habrá más
controversias que expertos”.
Pero
¿qué criterios se utilizan para saber si un cuadro es auténtico y para analizar
la técnica particular de un determinado artista? En la actualidad los expertos
pueden recurrir a los avances técnicos y emplear
la radiografía y la reflectografía infrarroja que permiten estudiar el
proceso creativo del artista.
Las
obras de Caravaggio se caracterizan por su
ejecución rápida, por su pincelada suelta y ligera, Caravaggio utilizaba el pincel con maestría y fluidez.
Especialmente característico de su obra es la presencia de incisiones realizadas con un punzón o con la parte posterior del
pincel sobre la preparación todavía húmeda, son marcas realizadas a mano
alzada, sólo apreciables con la ayuda de una luz rasante y que seguramente el
pintor utilizó como marcas de referencia
para situar algunos elementos puntuales de sus obras.
No
hace mucho se descubrió que Caravaggio empleó para la creación de imágenes una
nueva técnica, que lo alejaba de la manera de crear renacentista, él no empleaba ni dibujos preparatorios ni
bocetos, empleaba la cámara oscura y los espejos parabólicos, aprovechaba
los avances logrados en la época en el terreno de la óptica cuyo máximo
exponente era Galileo Galilei (era algo similar a los progresos digitales de
hoy en día).
Caravaggio
no fue el inventor de la técnica del
Claroscuro, que ya existía antes y él la había estudiado, pero sí su mayor perfeccionista llevándole a crear una
manera de pintar totalmente nueva que triunfaría en su época, marcando el paso
del renacimiento al estilo barroco. Las
sombras oscuras le servían a Caravaggio para remarcar más las zonas iluminadas,
es la luz la que moldea los cuerpos, una
luz siempre dirigida, que surge desde un lateral del cuadro, pero cuya
fuente nunca aparece en él. La luz tiene el significado simbólico de ser la
presencia de Dios. Además le sirve para acentuar
la expresión de los personajes que muestran sus emociones, de manera que
hacen comprensible el papel de las figuras en el cuadro. Caravaggio es
especialista en pintar el momento culmen de las historias y además lo hace
utilizando composiciones novedosas en las que destacan los escorzos.
Esta
técnica tendría numerosos seguidores, llamados caravaggistas, pero incluso ha marcado las artes del S. XX
como la fotografía de ManRay y de AnnieLeibovitz y el cine de Orson Wells y de
Hichcock
Otra
característica fundamental que iniciaría Caravaggio y marcaría todo el estilo
barroco es la no idealización de las figuras, tomaba a modelos de la calle,
pobres y prostitutas daban su imagen a santos y vírgenes y Caravaggio se negaba
a retocar sus imperfecciones, los pintaba tal cual eran con suciedad incluída,
quizás era su manera de expresar en el contexto de la Contrarreforma que Dios
ilumina a todos, ricos y pobres.
La
semana que viene nos aproximaremos a la
apasionante y difícil vida y obra de este autor que triunfó en vida y murió
pobre y sólo convirtiéndose en paradigma
del autor maldito.
Autora| Ana
Rebón Fernández
Vía| AnaRebón Fernández
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