Trajano y Adriano: los emperadores hispanos que marcaron la historia de Roma

Dos destinos entrelazados por la adopción y el poder Imagen ilustrativa e idealizada de Trajano. Trajano y Adriano fueron dos de los emperad...

Edwin Drake,el coronel del oro negro.

Cuando el hallazgo del petróleo en Estados Unidos, a mediados del siglo XIX, generó una de las mayores avalanchas humanas de la historia, las autoridades llamaron al único hombre capaz de mantener la calma: Lucky Luke.

En A la somba de los derricks, el famoso cowboy solitario consiguió detener las ambiciones de los más codiciosos, entre los cuales un hombre con sombrero negro y larga barba: Edwin Drake. Lo llamaban El coronel.

Pero no era sólo un personaje de cómic, fue realmente quien, en 1859, perforó el primer pozo de petróleo del mundo.

De unos diez metros de altura, la torre de madera que protegía el yacimiento se alzaba en el medio de un campo de Pensilvania, al noreste del país, entonces la mayor y una de las pocas conocidas reserva de petróleo.

La biografía de Drake se confunde tanto con la historia del precioso líquido que poco se sabe de su vida. Edwin Laurentine Drake nació en el seno de una familia pobre de rancheros de Nueva York y, a los 19 años, se fue de casa.

En el siglo XIX, el petróleo ya era conocido, aunque no tenía todavía una aplicación industrial o en automoción. Aún, no existían los motores de explosión, gran consumidores de gasolina; es decir, de petróleo.

Drake era conductor de tren y se había recorrido casi todo el país cuando, en 1858, se instaló con hijos y segunda esposa en Titusville. Los primeros exploradores andaban en la zona, viendo ya en el petróleo una importante fuente de energía.

La cita de un hotel.

La vida de Drake cambió cuando un jurista de Nueva York, un banquero y un profesor de Yale vieron en él el hombre que buscaban para cavar en el suelo hasta hallar petróleo. Compartían el mismo hotel. Era primavera de 1858, Drake se asoció con ellos, en la compañía Seneca Oil, y recibió un sueldo de 1.000 dólares para buscar, durante un año, reservas en la zona de Titusville.

En aquella época, el petróleo se usaba sobre todo para las lámparas y poco quedaba de las prácticas terapéuticas de la Antigua Roma. Drake se rodeó de hombres determinados, porque tras perforar los primeros cinco metros, empezaron los problemas. La Seneca Oil perdió paciencia y dejó de financiar a Drake, ya conocido como El coronel, por su autoridad y su disciplina en los campos de trabajo.

A más de diez metros de profundidad, nada más que agua surgía del agujero perforado. Convencido que se encontraba en el sitio acertado, Drake no tiró la toalla y buscó el respaldo financiero de varios amigos. Sólo vivía para su pozo, era una obsesión, una "locura", como llegaron a decir algunas testimonios de la época.

Desaparecen las referencias a su vida privada. Una historia que recuerda a la de Daniel Plainview en la película Pozos de ambición, de Paul Thomas Anderson.

El 26 de agosto de 1859, más de un año después de haber empezado a cavar la tierra y la roca, a 21 metros de profundidad, los hombres de Drake golpearon contra algo extraño, creando una grieta. Dejaron las herramientas y se fueron a dormir.

La mañana siguiente, el 27 de agosto, Bill Smith miró por la grieta, apestaba, corría un líquido espeso de color oscuro. Nada más perforar, el petróleo surgió en cantidad hasta ahora desconocida. Recogieron las primeras gotas en bañeras. El oro negro había entrado en la historia.

En A la somba de los derricks, el propio Drake pide la ayuda de Lucky Luke para alejar a los estafadores y los nuevos exploradores. Porque su hallazgo cambió para siempre el funcionamiento de la economía, marcó el nacimiento de la industria petrolera. El pozo de Drake, que lleva una placa blanca con su nombre, tenía una capacidad inicial de unos 50.000 toneladas de petróleo; es decir, casi toda la producción mundial conocida.

Un pésimo gestor.

Con el motor de explosión, los métodos de refinado mejoraron y el petróleo se convirtió en la principal fuente de energía no sólo para los coches sino también para la vida cotidiana.

La producción mundial, concentrada en Estados Unidos alcanzaba los cuatro millones de toneladas en 1880, 10 millones en 1890, más de 20 en 1910. En 1901 se descubrió las reservas de Texas, las mayores entonces conocidas.

Frente a la avalancha de gente en búsqueda de riqueza, Drake no supo protegerse. Todos copiaron sus métodos de perforación y El coronel dilapidó su fortuna en especulaciones varias. En 1863, mientras el sector no cesaba de crecer, él ya era un hombre arruinado.

En su país, Edwin Drake es considerado uno de los padres del modelo económico actual. EEUU perdió el monopolio de la producción de petróleo y las mayores reservas actuales se encuentran en Oriente Medio, principalmente en Arabia Saudí, donde los ingresos millonarios permitieron la creación de lujosos imperios. Drake, tras recibir ayudas públicas para sobrevivir, murió en la más absoluta pobreza el 9 de noviembre de 1880.
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Extraído de Público

El castillo de Feria (Badajoz).

Del castillo de Feria destaca fundamentalmente su enorme torre del Homenaje, de planta cuadrada y esquinas redondeadas. Todo el recinto se encuentra en lo alto de un promontorio, por encima de la localidad de Feria, que domina toda la zona en muchos kilómetros a la redonda y desde el que las vistas son realmente impresionantes.

Debido a su situación estratégica, el alto en el que se encuentra el castillo de Feria ha sido utilizado como punto defensivo desde que los primeros hombres se establecieron en estas tierras.

Los árabes ya construyeron una importante fortaleza defensiva en el siglo XI.

Siglos más tarde las tropas cristianas conquistaron la zona y Feria pasó a ser propiedad de Lorenzo Suárez de Figueroa, Maestre de la Orden de Santiago.

La familia Suárez de Figueroa llegó a ser propietaria de un importante territorio conocido como Señorío de Feria, que incluía numerosas poblaciones de la zona, incluyendo Zafra.

De hecho, la fortaleza de Feria tiene visión directa de los castillos de Villalba de los Barros, Zafra y Nogales, situados también estratégicamente para controlar y defender todo el territorio de los Suárez de Figueroa.

La torre actual y el conjunto principal del recinto del castillo de Feria debieron de construirse a mediados del siglo XV. Y posteriormente se llevaron a cabo algunas reformas y reconstrucciones.

El recinto amurallado tiene un trazado irregular que sigue la forma del terreno. La muralla incorpora torres o cubos redondos y prismáticos. En el interior existe otro muro transversal que divide el cuerpo principal del castillo en dos partes, lo que permitía reagrupar la defensa en caso de que alguna de las partes se viera comprometida por los atacantes.

La torre del Homenaje se sitúa en esa zona intermedia del recinto. La parte inferior de esta impresionante torre no tiene puertas, y el acceso a las plantas habitables de la torre se realiza desde la muralla, de forma que se aseguraba un alto nivel defensivo en caso de emergencia.

La torre consta de cuatro cuerpos. El sótano probablemente contendría el almacén de provisiones y el aljibe. La primera planta era la de residencia del señor del castillo y las dos plantas superiores que posiblemente tendrían un uso variado. Actualmente la primera planta ha sido restaurada y acondicionada.

En la parte superior de la torre se abría un conducto que llevaba el agua recogida hacia el aljibe situado en el sótano. Además de este aljibe de emergencia situado en la torre, cada sector del recinto amurallado disponía de su propio aljibe para almacenar agua.

Se pueden visitar las diferentes plantas de la torre y subir hasta la parte superior de la torre del Homenaje, donde las vistas son espectaculares.

Finalizada la visita al castillo no podemos dejar de pasear por las empinadas calles de Feria y disfrutar de su gastronomía en alguno de los mesones del pueblo.
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Extraído de Hoy

Lepra, una enfermedad prehistórica.

"Le dijo Jehová a Moisés: Vuelve a meter tu mano en tu seno. Y él volvió a meter su mano en su seno; y cuando la sacó, he aquí que su mano estaba leprosa como la nieve" (Exodo, 4). Al igual que la Biblia, numerosos textos antiguos, como el Atharva Veda o un papiro egipcio datado en el 1.550 a. C., dan cuentan de las lesiones que provocaba hace milenios la misma enfermedad que hoy conocemos como lepra.

A la documentación escrita sobre la existencia del trastorno en la antigüedad acaba de unirse la evidencia científica. Un equipo de investigadores estadounidenses ha encontrado pruebas de la enfermedad en el esqueleto de un varón que vivió en la India en torno al 2000 a.C.

Según los datos de este grupo multidisciplinar que ha aunado el trabajo de biólogos, antropólogos y arqueólogos, la lepra lepromatosa, el tipo más grave de la enfermedad, estaba presente en la zona asiática hace más de 4.000 años de antigüedad, lo que representa la evidencia más antigua de la enfermedad de la que se dispone.

Esta infección crónica, que se contagia por dispersión aérea del 'Mycrobacterium leprae' -también conocido como 'bacilo de Hansen'- provoca, principalmente, lesiones en la piel y un deterioro nervioso, aunque algunos pacientes también pueden sufrir la infiltración bacteriana en mucosas, testículos y huesos.

Precisamente el hallazgo de cambios patológicos en su área nasal y maxilar -las lesiones óseas más típicas de la enfermedad-, la existencia de problemas degenerativos en las articulaciones del esqueleto o la afectación de otros huesos, entre otros trastornos, fue lo que hizo que los investigadores sospecharan de la enfermedad.

Evidencia más antigua.

"Estos cambios eran una fuerte evidencia de la manifestación de una lepra", comentan los investigadores en su trabajo, que se publica en la revista de acceso público 'PLoS One'.

Tras varios análisis para descartar que las lesiones se debieran a otros trastornos, como la leishmaniasis, la tuberculosis o enfermedades por treponema, entre otras infecciones, los autores del trabajo, de la Appalachian State University de Carolina del Norte (EEUU), concluyeron que la causa del problema era una lepra lepromatosa.

Según estos investigadores, esta evidencia puede usarse para rastrear los patrones de transmisión de la enfermedad en la prehistoria. De hecho, el próximo paso de este equipo es tratar de encontrar ADN del 'Mycrobacterium leprae' en el esqueleto para compararlo con las cepas de la enfermedad comunes actualmente en el mundo.

Aunque es una enfermedad curable, unas 250.000 personas siguen sufriendo lepra en el mundo.
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Extraído de El Mundo

Martín Almagro-Gorbea: «Los imperios guerreros caen por su inestabilidad».

-Su «Historia militar de España» (Laberinto) no narra batallas.

-No. Se trata de entender el papel que juega la guerra en el desarrollo histórico; conocer las primeras etapas de los conflictos entre distintos grupos, que la Humanidad lleva varios milenios sin conseguir domesticar. Es un libro fundamental. El primer volumen está dedicado a la Antigüedad y a la Prehistoria, cuando surgen la guerra de guerrillas, el jefe carismático, armas como la espada, la lanza o el escudo, y las fortificaciones.

-¿Las guerras condicionaban el sistema cultural?

-Todo. El que no se defendía no sobrevivía. Y eso en toda la Humanidad. Culturas como Roma y Grecia eran esencialmente guerreras, los zulúes o los papúes, y los aztecas o los incas. Lo digo para no tener falsos pacifismos. Todas las culturas han valorado sobremanera la paz. Pero el que no hace la guerra, desaparece.

-¿Esos falsos pacifismos siguen vigentes?

-Es que a veces se confunden las buenas intenciones con las realidades históricas. Es un disparate histórico.

-¿Recomendaría este libro a los adalides del falso pacifismo?

-También, porque pueden hacer una reflexión profunda. Este libro no es belicista. No hay obra menos belicista que «La Ilíada», y está repleta de exaltación aparente al combate. Lo que está es valorando los aspectos positivos y fustigando lo terrible que es la guerra. Filosofía clásica que inspira esta Historia.

-Alto y meridianamente claro.

-Pues eso hay que decírselo a veces a algunos colegas. Como la arqueología es esencial, hemos partido del lema latino «facta non verba», es decir: «Hechos, no palabras, no posturas teóricas».

-No hay guerra sin sociedad.

-Una sin la otra no se entienden. El guerrero aparece hace unos 5.000 años. A partir del primer milenio a. C., seguramente con los fenicios, llega la idea de mercenario. Y frente a este concepto, el soldado.

-¿Cuáles son los más antigüos conflictos bélicos conocidos?

-De los que tengamos noticias aparecen en el arte rupestre levantino: un grupo de flecheros enfrentado a otro.


-¿No hay sociedades totalmente guerreras ni pacíficas?

-La experiencia histórica demuestra que una sociedad totalmente pacífica desaparecería la primera noche. Los grandes imperios guerreros han caído víctimas de su propia inestabilidad.

-¿Cuándo ha sufrido más conmociones bélicas España?

-Los 200 años que supone la conquista romana, procesos de guerras civiles terribles (pompeyanos y cesarianos). No podemos olvidar que España se ha fraguado en la Reconquista, en una invasión y en una reacción que ha durado 700 años, cuya conmemoración está a las puertas: 711. En la antigüedad todo extraño era un enemigo potencial, y eso lo tenemos en el subconsciente, porque el que no ha tenido ese miedo ha sido normalmente aniquilado.
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Extraído de ADN

El dolmen de Lácara.

Es un monumento megalítico (un sepulcro de corredor) de dimensiones sorprendentes, una verdadera joya arquitectónica del Calcolítico en un muy buen estado de conservación.

Está situado en plena dehesa, entre encinas, a pocos kilómetros de Mérida, en la carretera que une Aljucén con La Nava de Santiago.

La construcción de este tipo de monumentos se lleva a cabo a finales del Neolítico o a lo largo del Calcolítico, es decir unos 3000-4000 años antes de Cristo.

En el caso del Dolmen de Lácara se han encontrado puntas de flechas, puntas de lanza de cobre, cuchillos de silex y otros elementos que indican que fue utilizado como cámara funeraria durante el Calcolítico y la Edad de Bronce.

Para llegar hay que recorrer unos 10 Km desde Aljucén (aproximadamente la misma distancia desde La Nava). El acceso está señalizado mediante un cartel y se puede aparcar en el terreno que hay junto a la verja de entrada. Se accede a pie, a través de la puerta pequeña situada a la izquierda.

Una vez dentro del recinto hay que seguir la valla, dejándola siempre a mano derecha (alejándonos de la carretera). A unos 100 metros, siempre siguiendo la valla, se gira a la izquierda (avanzaremos aproximadamente en paralelo con la carretera). A unos 200-300 metros encontraremos una pequeña casa en ruinas.

Un poco más adelante (siempre siguiendo la valla) nos encontraremos el dolmen, una elevación del terreno que pasa casi desapercibida, alrededor de la cual se pueden ver algunas piedras que surgen del suelo siguiendo un patrón sospechosamente regular. Simplemente hay que rodear el perímetro para llegar a la zona abierta.

El dolmen está formado por un largo corredor cubierto, que da acceso a la cámara mortuoria.

Y la cámara es un verdadero prodigio. De las grandes piedras que se elevaban hacia el cielo (la cúpula estaría a unos 5 metros) sólo queda una intacta, que da idea de la grandiosidad de la construcción. Las demás aparecen partidas. Pero en la base se puede apreciar la precisión con la que fueron colocadas.

Toda la estructura estaba cubierta con piedras y tierra, hasta formar un gran túmulo.

Para reforzar y sujetar el túmulo se colocaban grandes piedras en la base, a modo de contrafuertes, a lo largo de un anillo exterior. Estas piedras son visibles en el perímetro del dolmen de Lácara.

Los dólmenes eran construcciones sagradas, utilizadas para enterrar a los miembros de la comunidad. La construcción de un monumento de este tipo suponía un esfuerzo enorme y necesitaba de la colaboración de muchas personas.

Sólo visitándolo se puede comprobar la majestuosidad de esta verdadera obra de ingeniería.
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Extraído de Hoy

Fases cambiantes en un planeta extrasolar.

Un grupo de investigadores de la Universidad de Leiden (Países Bajos) ha logrado registrar las fases orbitales de un planeta extrasolar por vez primera, como publican esta semana en la revista 'Nature'.

El descubrimiento, casi 400 años después de que Galileo Galilei observara que Venus tenía fases cambiantes como la Luna, demuestra que, en longitudes de ondas ópticas, el planeta se asemeja a lo que se ha observado en los planetas de nuestro Sistema Sistema Solar.

El hallazgo se refiere al planeta CoRoT-1b, el primero extrasolar que descubrió el CoRoT (Convection Rotation and Planetary Transit), una misión lanzada en 2006 por la Agencia Espacial Francesa, en colaboración con la Agencia Espacial Europea. Se trata de un gigante gaseoso con un tamaño similar a Júpiter.

El equipo liderado por Ignas Snellen, del observatroio de la Universidad de Leiren, presenta un análisis de datos fotométricos ópticos del mismo satélite que representa 36 órbitas planetarias. Sus datos, según aseguran, muestran que el hemisferio del lado oscuro permanente del planeta es totalmente negro. Sin embargo, en su cara diurna se refleja una pequeña parte de la luz que recibe de su estrella, que domina la curva de la fase óptica.

El satélite monitorizó este planeta durante 55 días, mientras en su campo de visión había unas 12.000 estrellas. El tiempo de vision fue de 512 segundos durante los primeros 30 días y 32 segundos para el resto de las observaciones, de donde se consiguieron 69.000 datos sobre su curva de luz que cubrían 36 órbitas planetarias.

Rayos X en un agujero negro.

'Nature' se hace eco también de una investigación internacional, con participación del CSIC, en la que se ha detectado por primera vez la emisión de rayos X más próxima a un agujero negro, en una región en donde la Teoría de la Relatividad es muy importante.

Este agujero negro, ubicado en una galaxia situada a 540 millones de años luz de la Tierra, engulle dos veces la masa de la Tierra en tan sólo una hora, según informa Efe. Se trata de un agujero que "come muy bien", según uno de los responsables de la investigación, Giovanni Miniutti, del Centro de Astrobiología (centro mixto del CSIC y el INTA).

En su opinión, "la materia atraída por el agujero negro sí se ve y a medida que cae hacia el agujero negro, se calienta tanto que emite su última llamada de socorro en forma de radiación muy energética de rayos X, antes de desaparecer para siempre".

Los agujeros negros, como su propio nombre indica, son totalmente oscuros y por tanto invisibles al ojo humano; debido a su intensa gravedad, ninguna partícula material, ni siquiera la luz, puede escapar de ellos. En este caso, sus características se han determinado al detectarse dos líneas deformadas por átomos de hierro. "Lo interesante no es la presencia del hierro, sino el hecho de que la señal de esa firma química llegue deformada por la gravedad del agujero negro y por la velocidad de la materia que emite", ha explicado el investigador. El estudio también ha permitido medir la rotación del agujero negro, cuya velocidad es muy cercana a la de la luz, la máxima posible según la teoría de la relatividad de Einstein.
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Extraído de El Mundo

Mallorca sufrió en el pasado los mayores hundimientos submarinos del planeta.

Investigadores del Instituto Geológico y Minero de España (IGME) y de la Universidad de las Islas Baleares han detectado en Mallorca más de 200 colapsos o hundimientos del terreno que tuvieron lugar durante el Mioceno superior (Messinense), hace unos 6 millones de años.

Estos paleocolapsos, considerados por los investigadores como el mayor episodio de hundimientos submarinos del planeta, pueden observarse en la costa sur y este de Mallorca; su exposición en los acantilados es extraordinaria y destacan por sus grandes dimensiones de hasta 500 metros cuadrados de superficie y 35 metros de altura.

Estas formas fósiles de hundimientos están estrechamente ligadas al desarrollo de una de las mayores plataformas arrecifales del Mediterráneo occidental y a las fluctuaciones del nivel del mar durante el Mioceno Superior, que controlaban el crecimiento y la posición de los arrecifes coralinos.

Durante las bajadas del nivel del mar, los corales quedaban expuestos, en un clima tropical-subtropical, a la disolución por las agresivas aguas subterráneas, y se fueron formando distintos sistemas de cavidades. Cuando el nivel del mar subía, se iban depositando nuevos sedimentos sobre los corales hasta que las cavidades se colapsaron y, sobre ellas, se hundieron grandes volúmenes de rocas cuando todavía no estaban consolidadas.

Pedro Agustín Robledo, investigador titular del IGME, explica que "los estudios de porosidad que se han llevado a cabo en los paleocolapsos han puesto de manifiesto el gran interés que tienen estas estructuras como potenciales reservorios de hidrocarburos o de aguas subterráneas. En términos generales, este curioso episodio geológico puede contribuir a mejorar el conocimiento de los eventos paleoclimáticos críticos, que sucedieron a lo largo de la historia de la Tierra"».
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Extraído de El Mundo